lunes, 1 de octubre de 2012

¿Cómo funciona la boca entre los 6 y 24 meses?

NACEMOS SIN DIENTES:

Al nacer la boca de un bebé es plana, y durante los seis primeros meses permanece así mientras no salgan los dientes. Lo esencial en esta etapa poder tener una lactancia materna que obliga al bebé a ejercitar la musculatura para poder desarrollar la masticación unos meses después.

Altura mínima de la boca, por no haber erupcionado ningún diente


ERUPCION DE LOS INCISIVOS:
Entre los 6 y 12 meses saldrán los primeros incisivos inferiores y superiores, aumentado la altura de la cara

  • Normalmente a los 6 meses salen los incisivos centrales inferiores. 
  • A los 7 meses lo harán los incisivos centrales superiores. 
  • En torno a los 8 meses erupcionan los incisivos laterales inferiores. 
  • Con 9 meses lo harán los incisivos laterales superiores. 
Lo fisiológico es que los incisivos estén separados, este espacio sobrante lo aprovecharán en su dia los dientes definitivos al salir a boca. Cuando los dientes están muy juntos, es sinónimo de un paladar pequeño, o una boca que no mastica por lo que no se desarrolla y necesitará de la estimulación precisa con aparatología más adelante, ya que los dientes definitivos saldrán amontonados al tener poco espacio.
Separación favorable entre dientes de leche para el recambio dental


Con la erupción de estos dientes se crea nuevo circuito neural que hará moverse la mandíbula a delante y a los lados para atrapar y cortar los alimentos, se crea así al contactar los dientes el primer estímulo masticatorio.
Aumento de altura de la cara, con la erupción de los incisivos



Nos podemos encontrar la situación en que al erupcionar los incisivos superiores no pueden contactar con los inferiores, por estar estos retrasados debido a que la mandíbula crece poco sino tiene una buena estimulación (lactancia artificial, chuparse el dedo, uso del chupete..). Aquí no se va a crear el circuito neural que hará moverse la mandíbula hacia los lados, por lo que serán niños que masticarán en apertura y cierre, comerán lentamente, la carne la exprimirán para obtener sus jugos y escupirán las fibras, por lo que habitualmente los padres tenderán a alimentarlos con dieta más blanda o purés que comerán más fácilmente.

Mordida abierta con falta de contacto entre incisivos
lo que no dificulta la masticación a los lados


ERUPCION DE LOS PRIMEROS MOLARES:
Entre los 12 y 16 meses aparecen los primeros molares temporales. Con ello se crea la primera mordida al engranarse las cúspides de las muelas superiores e inferiores. 

ERUPCION DE LOS CANINOS:
Entre los 16 y 20 meses, saldrán los caninos por detrás de los incisivos y por delante del primer molar. Estos serán los dientes que dirijan la masticación hacia los lados al resbalar el canino inferior sobre el superior en la masticación lateral. A veces saldrán antes que el primer molar siendo esto considerado una situación normal también.

ERUPCION DE LOS SEGUNDOS MOLARES:
Finalmente entre los 20 y 24 meses los últimos dientes en salir son los segundos molares. La muelas tienen una anatomía que la naturaleza ha previsto para que engranen las de abajo con las de arriba, mediante cúspides, fosas y surcos que permiten el movimiento hacia los lados para desengranar las muelas y como la rueda de un molino deshacer los alimentos.
Dentición temporal completa con 20 dientes


DESARROLLO BUCOFACIAL EN EL LACTANTE:

La cara se desarrolla desde recién nacido durante los primeros años de vida, gracias a la estimulación que recibe (respiración y masticación),  por ello unos estímulos desfavorables (respiración bucal, lactancia artificial, dieta predominante blanda) o estímulos nocivos (uso del chupete más allá de los dos años, succión digital, deglución atípica) traerán una falta de desarrollo facial solo apreciable años más tarde.



Si el niño tiene una dieta predominantemente blanda más tiempo de lo deseable (sólo toma biberón y papillas) la mandíbula se mantendrá corta y todos los dientes inferiores quedarán retrasados y atrapados dentro del paladar por lo que la boca no funcionará bien hacia los lados. 
Lactancia artificial constituye una estimulación pobre para el desarrollo bucal


Antes del primer año, hay que introducir alimentos sólidos para que se produzca la transición desde lactante (que mueve la mandíbula de atrás a delante) a un primer mordisqueo entre los incisivos (movimiento de atrás a delante y hacia los lados). Es bueno dar fruta para que el niño la muerda o deshaga, absorba los jugos y se empiece a acostumbrar a otros sabores. Posteriormente daremos alimentos para que aprenda tragar sólidos, como son pescado, queso, pavo, etc.. Finalmente será necesario que aprenda a masticar con alimentos más secos y duros, al ser crujientes los deshará con más facilidad para ir estableciendo una nueva masticación (moviendo la mandíbula a ambos lados).
Masticación de pescado desmigado


Cuando una mala estimulación ha creado una boca, que mastica en apertura y cierre, sin masticar hacia los lados, para desgarrar los alimentos. Será frecuente que se eternicen comiendo, harán bolas de alimentos en los carillos ya que mastican con dificultad y es difícil introducirles la carne, que son alimentos más complicados de comer. En estos casos los alimentos se introducirán más lentamente, dándole primeros aquellos por los que tenga preferencia, en trocitos pequeños. Si hace una bola se mezclarán con alguna fruta acuosa o agua para que le sea más fácil tragarlo hasta poder darle el alimento sin más. Si hace una bola hay que empujarle con el dedo para que la mueva y la mastique.
Boca que mastica abriendo y cerrando sin movimientos a los lados


Es esencial que cuando salgan las primeras muelas, entre los 12 a los 18 meses, se debe pasar un cepillo o gasa sobre la superficie con la que se mastica al menos una vez al día, sino en ocasiones aparecerán caries en muelas que duran hasta los 10 años aproximadamente.

Otra recomendación básica será que entre los 16 y 20 meses eliminemos el uso del chupete, ya que sino al pasar muchas horas al día interpuesto entre los incisivos, favorecerá el desarrollo de una mordida abierta.



Otra recomendación importante si su hijo se chupa el dedo es quitar el hábito entorno al año.